Yo no salgo (Los Milpejetas)

Tanguillos en el arranque de la actuación de Yo no salgo. Pelucón estilo Camarón de la Isla, camisa de topos, pantalón pintillo y zapatos amarillos. Son una chirigota de Cádiz que viene a Badajoz a actuar y a ganar todo el dinero posible. Tanto que también van a Mérida, ciudad con la que confunden a Badajoz.

Esperpento del chirigotero gaditano a la máxima potencia, capaz de cualquier cosa para ganar unos euros, por ello les llaman el Milpejetas. En las butacas del López se escucha "chirigota, chirigota", como si del Falla se tratara. contínuos guiños a la Tacita de Plata  y su acento (picha, carajo, quillo). Primer pasodoble con la parodia del viaje de estos gaditanos que rematan haciendo un paralelismo con la emigración (aquí sabemos lo que cuesta ganarse el pan fuera de casa). Segundo pasodoble, crítica a la gestión del Carnaval desde el Ayuntamiento. Antes del cuplé, se cubren la cabeza con un gorro rojo. Primer cuplé a los tópicos sobre los andaluces. Estribillo pegadizo. Segundo cuplé para bromear con las murgas femeninas. Bien aprovechados los minutos extra con diálogos y gracietas.

Vamos con el popurrí, muy divertido, con constantes cambios de ritmo. Son gaditanos hiperactivos, con críticas pero desde el punto del humor. Haciendo coñas del carnaval de Cádiz han hecho una gran defensa del carnaval de Badajoz. Final  con mucha complicidad con el público, al que animan a que les griten "chirigota, chirigota", lo que hace todo el López encantado. Y se marchan con tanguillos, como empezaron. Y público puesto en pie. Al descanso, y al bocata.