Las Chimixurris

Dos semanas para que comience el concurso, dos semanas. Retomamos el repaso a las agrupaciones que comparecen este año en el COMBA y le toca el turno a las Chimixurris. Estarán 15 en escena, donde saldrán con dos guitarras: Estefanía Pérez y María Garrancho, nueva este año y primera vez que está en una murga. Y como "novedad" también la vuelta de Tamara Pulido, que ha estado trabajando fuera de Badajoz y de Erasmus y hacía cuatro años que no subía al López con sus compañeras, aunque en Carnaval siempre ha estado y cantado en bares con las Chimis. Sufren una baja, la de la guitarrista de los dos últimos años, Beatriz Rodríguez.

La preparación este año pues va bien, como todos (risas), aunque intensa. Cada vez es más difícil cuadrar horarios con los trabajos. Son pocas las que no trabajan hasta la noche, por lo que los ensayos los empezamos prácticamente a las 23.00 horas. Y todo eso unido a que "nos hacemos mayores" (sic), y tienen más responsabilidades... pues cuesta mucho sacar todo, pero ahí están. Pero trabajando en grupo todo se consigue, pero sí que es cierto que cada vez cuesta más. 

Sobre su experiencia como finalistas a lo largo del año, realmente tampoco es algo que se viva como tal. La euforia sí que la tuvieron durante todos los Carnavales, porque fue un año de mucho muuuuucho trabajo y vieron la recompensa, estuvieron muy orgullosas de lo logrado en 2016. Pero fuera de ahí tampoco es algo que tengan presente. Lo importante es disfrutar de cada actuación como ellas hacen. 

Sobre la norma de 25 minutos creen que puede ser un arma de doble filo, ya que a la hora de contabilizar el minutado de actuación... ¿cómo sabes si se ha parado cronómetro? ¿Cómo determinas qué es actuación y qué no? 

Nos comentan también que el concurso depende mucho de cada año y cada murga, pero sí que se ve que cada vez se preparan más las actuaciones. Y creen, al igual que otras agrupaciones, que este año va a ser de los currados. 

Su actuación seguirá la linea que han mantenido desde el primer año. No son una chirigota, pero tampoco quieren ser "siesas". Se describen como una murga crítica y "salá", así que aunque sean más serias que graciosas, siempre intentan dar un toque de humor a sus letras. 

En cuanto a la doble vara de medir entre murgas masculinas y femeninas, ellas no lo llamarían exactamente así. Creen que si una murga es buena, se reconoce siempre. Lo que sí es cierto es que es más fácil que guste una murga de hombres a una de mujeres, y que los hombres se pueden permitir muchas más licencias que las mujeres en el repertorio, en la forma de cantar, de hacer chistes... 

Este año esperan disfrutar y, como no, que guste su actuación. Trabajada está, y si se disfruta, seguro que gusta más. Lógicamente a todos les gusta estar cuanto más arriba mejor, si no, no se presentarían al concurso... Lo que luego reconozca o no el jurado, no depende de ellas. ¡Así que el disfrute por delante!

Y poco más... el tipo es secretooooooo.No ha habido manera de sacárselo...´¡Suerte, chicas!