Estos chicos tuvieron que cambiar su repertorio en noviembre, porque no habían contemplado que el presidente norteamericano ganara las elecciones. Salen de detrás del estrado y no llevan pantalones, van en calzoncillos de colores y ligueros para los calcetines. Primer pasodoble para el personaje que representan. Y de nuevo paralelismos entre las elecciones de Donald Trump y Mariano Rajoy. Segundo pasodoble al cambio climático, con sentido del humor. Llegan los cuplés, el primero para la moda de los gimnasios. Segundo para las barberías. Genial detalle imitando hablar inglés con el verso (más o menos): what a meny consu" de la canción Sopa de Caracol. "Soy un truhán, soy un señor, lo mismo que un español".
Daddy, Daddy cool, la canción de Boney M, sirven para que Putin, que ha salido a escena, juegue con ellos y con el botón nuclear: dale, dale tú. No podía faltar La muralla para que Donald Trump decida a quien abre o cierra el muro. Y un detalle de grandeza del presidente: Yo tener amigos gays, a quien pago vacaciones para que os curéis, en Guantánamo....
Buena parodia, gran disfraz y difícil de representar con acento yankee. Pero cuidado:
si en Cádiz se han cabreado con la parodia de Yo no salgo, a ver qué nos dicen desde el CarnavaldeWashington.com Venga, que es Carnaval. Y termina la preliminar. A esperar los resultados en la pantalla de San Francisco.
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