Disfraz que me cae especialmente simpático. De autónomo. Y
me gusta la presentación, sí señor, a pesar de lo duro de este estatus, siempre
buena cara. Y genial decorado, con una verja levantada a la puerta de un
establecimiento que es...la puerta de Hacienda. Uno de los componentes tiene un gimnasio. Un gimnasio…online.
Genial.
Primer pasodoble en el que equiparan la situación de los
parados con la de su murga. Segundo pasodoble al maltrato. A pesar de ser un tema muy manido, lo rematan de forma muy original, porque en su murga no ven mujeres. Punto de autocrítica. Primer cuplé al
rodaje de Juego de Tronos en Cáceres (tema no tocado hasta ahora). El segundo a
las modas que adopta el personal en este país, por ejemplo el mannequin
challenge. En este país se llevan todas las modas que conlleven estar parados... Estribillo pegadizo (te lo doblo, te lo doblo, te lo doblo (el
sueldo)”, mientras doblan la nómina. Genial entrada de popurrí con música de
Joaquín Sabina (Así estoy yo sin ti). Y otra vez la bicicleta. Todas las veces
que no había salido ayer ha salido hoy.
Y durante todo el popurrí, continuas referencias a lo duro de la vida del autónomo, riéndose de ellos mismo. Arriba los emprendedores (y encienden los encendedores como en un concierto), facturas sin I.V.A., comidas de empresa...una auténtica parodia de los autónomos de este país. Incluso se extrañan de ver a un chino en Hacienda...
Divertidísima actuación que completa una noche con un nivel claramente superior a lo que vimos ayer. Eso sí, Carlos Santos se marcha deprimido. Su Barça le ha amargado una buena noche de murgas. Y a Julián, como es funcionario, le explicamos la actuación en la Buhardilla.
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